Le Creuset inaugura su primera tienda en Barcelona

No es de extrañar que Le Creuset tenga su origen en uno de los países con mayor tradición culinaria. Si los franceses, descubridores del champagne, del foie y de otras muchas delicias gastronómicas, aprecian tanto la calidad y el diseño de las cocottes Le Creuset, por algo será, ¿no?

En un mundo donde la producción en serie y la obsolescencia programada son las leyes que gobiernan la industria, sorprende que todavía haya espacio para empresas como Le Creuset con una apuesta tan decidida por la tradición y la calidad. Desde su creación en 1925, en la fundición de Fresnoy-le-Grand siguen empleando el mismo proceso artesanal y minucioso para fabricar sus famosas cacerolas de hierro colado y esmaltado de infinidad de colores.

Cada utensilio salido de la fábrica se convierte en una pieza única y con garantía de por vida, en cuya elaboración intervienen más de 30 artesanos. Tal es el arraigo y la admiración que los franceses tienen por las cacerolas Le Creuset, que en algunas zonas del país es tradición regalar una usada a los novios en la víspera de la boda. Una muestra más de la resistencia de unos utensilios de cocina que se heredan generación tras generación.

Desde mediados de diciembre los amantes de la cocina y de las cocottes Le Creuset cuentan con un nuevo espacio donde descubrir y comprar las diferentes gamas de productos de la marca francesa que, además de cacerolas, incluye artículos de silicona (moldes, espátulas, batidoras) y accesorios de cocina (vaporizadores de aceite, teteras, juegos de café…).

La primera tienda Le Creuset de Barcelona está ubicada en la calle Consell de Cent 357, entre el Passeig de Gràcia y Pau Claris. Ocupa 140m2 dedicados a la exposición y venta y cuenta con “show cooking” para demostraciones y eventos culinarios.

Le Creuset
Consell de Cent, 357
www.lecreuset.es