Blue Frog es tu oasis de American Grill en el centro comercial

Ir a un centro comercial, hemos de admitirlo, a menudo se convierte en una insoportable odisea consistente en visitar decenas de tiendas para complacer a tu pareja sin rechistar. Pero además de aglomeraciones y establecimientos que no nos podrían dar más igual, estos lugares a menudo verdaderos oasis gastronómicos en los que ahogar las penas con unas buenas viandas. Es el caso, por ejemplo, de Blue Frog American Grill que, aunque la sola idea de que sea una cadena mundial pueda generar algo de rechazo, podríamos decir que se encuentra más cerca de un Chivuo’s o un Oval (aunque sin opción DIY) que de un Mc Donald’s o Burger King.

Lo primero que uno se encuentra cuando entra en un Blue Frog, que recientemente ha abierto sus puertas en el flamante centro comercial Finestrelles (Esplugues), es un local de esencia yankee que te transporta al país de las barras y las estrellas. Abrir la carta, además, es hundir tu nariz en un fascinante universo gastronómico de posibilidades infinitas. Para ir abriendo apetito, el encargado nos recomienda efusivamente que probemos su plato estrella, los nachos tribeca, que vienen acompañados, claro, de cheddar fundido y guacamole, pero también, ojo, de fresas. La combinación es mortal, la verdad, y las cantidades muy generosas: con una ración comen cuatro. Otros musts a apuntar son las alitas barbacoa, los spring rolls crujientes o los calamares fritos.

Y es que las fresas, junto al azul corporativo, son dos de los elementos que más llaman la atención de la carta. Otra de las recomendaciones es la Blue Sangría, servida también con trocitos de fresa. Es tan divertida y empalagosa como te puedes imaginar, una vuelta a la adolescencia en toda regla y muy agradecida. Pero si eres un tipo serio también puedes apostar por cócteles de corte clásico como el Martini, el Cosmopolitan o el Manhattan, todos ellos con su particular vuelta de tuerca Blue Frog.

Para los principales nos permitimos el lujo de no atender a las recomendaciones. Nos dicen que las costillas de cerdo se deshacen en la boca, pero aquí hemos venido a probar las hamburguesas. Nuestras dos elecciones nos dejan noqueados: la Golden Gate, con queso azul, pera caramelizada y anacardos fritos, y la Fifth Avenue, con huevo frito, salsa de trufa, queso taleggio. La carta también incluye buena oferta de carne y hasta salmón a la parrilla. Ya con poco saque llegamos a los postres para acabar totalmente del revés. ¿Cómo escoger entre un cheese cake con base de galleta (y fresas, claro), el American Dream Waffle cubierto de chocolate fundido o la cookie de mantequilla de cacahuete? Una locura, tú.