La navidad a través de un cristal

El cerebro de una persona tarda una milésima de segundo en decidir si lo que está viendo le gusta o no, y esto en el caso de los escaparates es fundamental ya que es el primer paso para provocar que la gente se acerque a ellos. Pero, ¿qué hacen las marcas de Paseo de Gracia para atraer a la gente hasta sus escaparates durante el periodo navideño?

Una de las líneas de comunicación más habitual es la idea de presentar el regalo perfecto. Estas fechas invitan a regalar, a tener un detalle con esa persona a la que aprecias demostrándole que has pensado en él/ella, dándole un pedacito de ti en ese regalo.

En este grupo nos encontramos a Louis Vuitton con un escaparate perfectamente producido, con unas siluetas de cajas de regalo doradas, con un código de color masculino y femenino, donde unos globos de colores añaden movimiento a la composición del mismo creando una figura dinámica y enmarcando el producto dentro de estas cajas, que son un símbolo de lujo y poderío propios de la firma.

Siguiendo con esta idea, Burberry utiliza unas figuras de madera que transportan cajas de regalo hacia una montaña dorada a través de la cual el producto “escala” hasta la cima. Algunas de estas figuras con un movimiento circular ,añaden dinamismo a la composición y atrae la mirada de los viandantes, aportando un guiño divertido con estos “trabajadores” incansables.

Otra de las referencias que se utiliza en Paseo de Gracia es la de la diversión y la sorpresa. Uno de estos ejemplos es Santa Eulalia, con una decoración de marcado carácter internacional ,que inunda el escaparate hasta la fachada de su edificio, convirtiendo la tienda en un candyland barcelonés. Piruletas en movimiento y bastoncillos de caramelo gigantes atraviesan el cristal del escaparate envolviendo el espacio y con un colorido que casa perfectamente con la decoración navideña de Paseo de Gracia.

Stella Mc Cartney por su parte, con su estilo desenfadado, llena de luces sus escaparates, permitiendo ver el fondo de tienda y dando un tono de color divertido y juvenil. La calidad del resultado podría ser mejor en un escaparate cerrado, pero debido a la dimensión de la tienda mantenerlos sin fondo aumenta la sensación de espacio lo que es un beneficio en una tienda tan pequeña.

Por último, jugando con la idea del frío y de la nieve, Bottega Veneta nos sorprende con sus buzones llenos de regalos y Tiffany & Co. Con sus exquisitos trabajos en las vitrinas del hotel Mandarin Oriental recrean la llegada del frío y de la nieve, de una forma sutil y muy elegante. Un paisaje urbano de fondo y unas figuras recortadas recrean un paseo por el parque, un momento especial e íntimo que se relaciona perfectamente con el producto y nos invita a soñar.

Porque en definitiva, de esto se trata, de emocionar a las personas y conseguir que experimenten sensaciones al verlos. El éxito de un escaparate de lujo no es tan sólo la colocación perfecta del producto, sino conseguir perdurar en el recuerdo de las personas con una imagen especial que haga vibrar a los espectadores y que esas emociones lleven el espíritu de estas fechas tan especiales.