Visión anarquista de la Guerra Civil
El Arxiu Fotogràfic de Barcelona presenta una exposición centrada en la gráfica anarquista del conflicto bélico.
Donde la Rambla desembocaba al mar tenemos uno de los monumentos más llamativos de la ciudad, una alta columna flanqueada de estatuas y coronada por la de Cristóbal Colón. Es uno de los nuestros monumentos más antiguos, fue inaugurado el 1 de junio de 1888, así lo contaba La Vanguardia: se montaron “tribunas frente al monumento levantadas con destino a la Corte, a las corporaciones provincial y municipal, invitados de otras corporaciones e institutos, etc., etc.; y dispuestas están cuatro mil sillas para otras tantas damas”. Estaban allí la reina regente “acompañada por sus damas (…) y los altos funcionarios de su casa y cuarto militar”, el presidente Sagasta, varios ministros, el capitán general, el alcalde Rius y Taulet y el alcalde de Génova, “la Diputación Provincial y comisiones del cuerpo consular, de la Escuadra, de la Audiencia, de la Universidad, de diferentes sociedades”. La masa se agolpaba en las inmediaciones, ”eligiendo de antemano cada quisque el árbol en que se subirá para ver mejor, el farol cuyo pedestal le servirá de asiento o la silla mas a propósito”. Una multitud daba la bienvenida al monumento.
Una primera decisión de construir un monumento a Colón la toma en 1873 el Ayuntamiento republicano, el lugar elegido es el Portal de la Pau, entonces Plaza de la Junta Nacional. El pronunciamiento del general Martínez Campos pone fin a la República con la restauración de Alfonso XII y la idea del monumento queda aparcada.
En 1881 se retoma el proyecto y para ello se nombra una comisión y se convoca un concurso. Participan 27 proyectos y el ganador es Gaietà Buigas i Monravà (años después su hijo Carles será el autor de la Font Màgica de Montjuïc). De la ilustración del proyecto sorprende que el almirante en lugar de adoptar la postura que finalmente tendrá, con una carta de navegación en una mano y el brazo derecho estirado señalando al horizonte, aparezca abrazado a una bandera.
A los que les gustan los datos su altura es de 60 m., es el mayor de los 64 monumentos que hay dedicados al almirante. La columna pesa 205 toneladas y si añadimos su decoración 233. La estatua de Colón mide casi 8 metros, el dedo medio metro.
Fragmentos de la estatua colosal de Cristóbal Colón, fundida en los talleres de los Sres. Vidal y Companía (De fotografía), La Ilustración Espanola y Americana, 30 de mayo de 1888.
La primera piedra se colocó el 26 de setiembre de 1882 y se tardaron casi seis años en verlo levantado. Primero se hicieron los trabajos de extracción de tierra y cimentación. Con la superficie preparada se levantó la base del monumento y el primer cuerpo, todo con piedra. Entonces se levantó el andamiaje para ir montando la columna de hierro. El andamio despertó admiración y empezaron a circular los primeros chistes: “pocos son los admiradores del monumento, en cambio muchísimos son los admiradores del andamio, ¿no podrían pasar del monumento y conservar el andamiaje”.
Se fueron colocando, una a una, la base y las cuatro partes en que se dividió la columna, después el capitel y, al final, la gran estatua del descubridor.
-¿Como lo subieron?
-Hombre por el ascensor.
-¿Y como pudieron pasarle el brazo?
-Oh! Es que tenía las manos en los bolsillos
Ascensor, Cu-Cut, 2 de octubre de 1902
DE LA BASE AL DEDO DE COLÓN
El monumento está plantado en una gran superficie en forma de circunferencia a la que se accede por cuatro escalinatas flanqueadas por parejas de leones.
La base del monumento está rodeada por un zócalo con relieves historiados intercalados por escudos de piedra.
Sobre la base se erige la columna asegurada por cuatro contrafuertes de piedra sobre los que se colocan cuatro matronas, entronizadas, que representan a Catalunya, Aragón, Castilla y León, y entre ellas cuatro grupos de personas que ayudaron a Colón en su empresa. El lema del proyecto de Buïgas era “Honrando a Colón, Cataluña honra a sus hijos predilectos” y en este sentido se eligieron cuatro personalidades de origen catalán: un militar Pere Bertran de Margarit y un religioso Fra Bernat Boïl
un científico Jaume Ferrer de Blanes y un banquero Lluis de Santàngel.
La columna está profusamente decorada. La base está decorada con proas de naves, grifos, águilas y famas aladas.
Del fuste acanalado cuelgan anclas, cadenas, una inscripción y hojas de cáñamo y en capitel, debajo de los acantos del orden corintio están las alegorías de los cuatro continentes.
ENIGMA COLÓN
Del monumento lo sabemos casi todo. Pero la vida de su protagonista siempre ha sido un enigma. Aunque ningún documento fiable lo acredita, la historia siempre ha dicho que era italiano, de Génova, y que nació en 1451. Navega desde muy joven, hace de corsario y llega a Portugal. Idea una expedición a las Indias a través del Océano y, tras no ser aceptado su proyecto por el rey de Portugal, convence a los Reyes Católicos para que le financien. Sale del Puerto de Palos el 3 de agosto y llega al nuevo continente el 12 de octubre de 1492. A éste primer viaje le seguirán tres.
La genovesidad de Colón ha sido puesta en duda por diversas teorías que lo hacen nacido Barcelona, Génova e hijo de una familia judía catalana (los judíos acabarían expulsados en 1492), la isla de Génova que, delante de Tortosa, estaba en el Ebro, Cerdeña, Mallorca, gallego, extremeño, portugués…
En 2004 Discovery Channel emitía un documental sobre el origen catalán del descubridor. Nadie se podía tomar a broma las viejas teorías que lo hacían nacido en territorio de habla catalana. Uno de los puntos que apuntaban los orígenes son los filológicos, las expresiones que usa en las cartas y diarios están llenos de catalanadas (palabras y expresiones en catalán, balear). Además se sabe que la expedición se paga en ducados, la cobran en moneda del reino de Aragón.
Las primeras hipótesis surgen de un historiador peruano, Luis Ulloa, en 1927-28, quien buscando un navegante gallego encontró uno catalán. Desde entonces, se han ido añadiendo nuevos historiadores y se ha hablado mucho sobre el tema. Por un lado, si Colón era catalán no quiso que se supiera su origen, seguramente para evitar represalias, es decir que Colón escondía algo, tenía un lado oscuro. Esta vía ha dado interesantes y novelescos orígenes: judío, hijo ilegítimo de un noble (Príncipe de Viana), de una familia contraria a Juan II durante la guerra civil catalana (1462-1472), corsario… Por otro lado, se ha afirmado rotundamente que hubo una manipulación de la historia y que se escondió deliberadamente el origen por razones de Estado para desposeer a los Colón de sus derechos americanos. Así se negó que descubriera nada sino que se lo encontró por casualidad y además se le hizo extranjero.
Nunca sabremos qué hay de claro en este turbio asunto, ¿quién fue en verdad Colón? Al menos sabemos qué cara tiene su estatua en Barcelona.
En 1982, aprovechando los andamios puestos para limpiar la estatua se hizo una instantánea de la cara de la estatua.
El Arxiu Fotogràfic de Barcelona presenta una exposición centrada en la gráfica anarquista del conflicto bélico.
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