Celebrando el 12 de octubre

Cada año, el 12 de octubre, el día del Pilar, se celebra la Fiesta Nacional de España. Es una fecha histórica, el momento del encuentro entre el viejo y el nuevo mundo. El 12 de octubre de 1492, la expedición de tres naves, La Pinta, La Niña y La Santa María, que capitanea el almirante Cristóbal Colón, desembarca en la pequeña isla de Guanahaní, en el archipiélago de las Bahamas.

CELEBRANDO LOS 400 AÑOS

La primera celebración importante tuvo lugar 400 años después de la llegada de Colón a tierra americana. Una cifra tan redonda llevó a la reina María Cristina a firmar un decreto, desde el Monasterio de la Rápida, en Huelva, que establecía la fecha como un festivo Día del Descubrimiento del Nuevo Mundo. Ninguna celebración igualó aquel 12 de octubre de 1892.

En Huelva, las fiestas empezaron con la llegada de una reproducción de la Santa María, el izado de las banderas de los estados americanos en la Rábida y una misa especial. Más tarde tuvo lugar un Congreso y como colofón se produjo la llegada a Huelva de los Reyes que asistieron a una serie de actos y rindieron visita protocolaria a la Rábida y Moguer.

Cuarto Centenario del Descubrimiento del Nuevo Mundo. Grandes Fiestas en Huelva, a las que están invitadas  SS.MM.Y AA.RR, del 2 de agosto al 12 de octubre.

En Barcelona hubo una gran misa oficial en la catedral, así como actos oficiales organizados por el Ayuntamiento. El escenario más multitudinario fueron las inmediaciones del monumento a Colón, el Passeig Colon se decoró de forma especial para tal ocasión. Conservamos una formidable imagen captada por parte del fotógrafo Esplugas.

Una pieza de coleccionista del evento que se puede adquirir por internet.

DEL DÍA DE COLÓN AL DE LA RAZA

La primera idea de realizar una celebración común en los Estados hispanos cada 12 de octubre,  se da en 1912, como lo hacían los norteamericanos y los italianos en los Estados Unidos, se trataba de conmemorar un Día de Colón. En 1913, desde la Unión Ibero-Americana, que presidía el exalcalde de Madrid y exministro Faustino Rodríguez San Pedro, se empieza a reivindicar la celebración de un Día de la Raza, “en forma que a la vez de homenaje a la memoria del inmortal Cristóbal Colón, sirva para exteriorizar la intimidad espiritual existente entre la Nación descubridora y civilizadora y las formadas en el suelo americano, hoy prósperos Estados”. Era un día de unión entre españoles y americanos, aquellos que compartían una misma lengua. Será cinco años después, en 1918, cuando se establece de forma oficial su celebración el 12 de octubre. Así rezaba la ley « Don Alfonso XIII, por la gracia de Dios y la Constitución, Rey de España; A todos los que la presente vieren y entendieren, sabed: que las Cortes han decretado y Nos sancionado lo siguiente: Artículo único. Se declara fiesta nacional, con la denominación de Fiesta de la Raza, el día 12 de Octubre de cada año. Por tanto: Mandamos a todos los Tribunales, Justicias, Jefes, Gobernadores y demás Autoridades, así civiles como militares y eclesiásticas, de cualquier clase y dignidad, que guarden y hagan guardar, cumplir y ejecutar la presente ley en todas sus partes. Dado en Palacio, a quince de Junio de mil novecientos diez y ocho. –Yo el Rey. –El presidente del Consejo de Ministros, Antonio Maura y Montaner.»

Pero ese año no se pudo hacer nada lucido, el peligro de la gripe que amenaza a la población aconsejó que no hubiera actos masivos.

LA HISPANIDAD

La denominación de la fiesta no fue del todo bien acogida y fueron muchas las críticas. Una muy coherente argumentaba que la denominación raza sólo podía aludir a la humana. Las connotaciones que el nombre tenía con las nuevas ideologías fascistas molestaba. Se pensó en  un nombre más idóneo para la fiesta y se habló de celebrar la Fiesta Hispanoamericana.

En 1926 el sacerdote español Zacarías de Vizcarra propone el nuevo concepto de Hispanidad para sustituir el de Raza “para denominar con un solo vocablo a todos los pueblos de origen hispano y a las cualidades que los distinguen de los demás”. El concepto se inspiraba en el de Cristiandad.  Estas ideas se concretan en la figura de Ramiro de Maeztu que también manifiesta que el nombre debe cambiarse, sin dudarlo, por el de Día de la Hispanidad. El nombre fue aceptado y los actos de celebración se celebraron cada vez más como Día de la Hispanidad que como Día de la Raza. El cambio, de forma oficial, se produjo en 1958, afianzado el régimen franquista, con un decreto de la presidencia del gobierno: “dada la enorme trascendencia que el 12 de octubre significa para España y los pueblos hispanoamericanos, el 12 de Octubre será fiesta nacional, bajo el nombre de Día de la Hispanidad”. Durante los años del franquismo la celebración se convirtió en una manifestación de las bases ideológicas del régimen y los actos se convierten el escenario ideal de propaganda.

HOY, FIESTA NACIONAL DE ESPAÑA

La celebración del 12 de octubre cambia de nombre dos veces en democracia. En 1981 se denomina Fiesta Nacional de España y Día de la Hispanidad. Más tarde, en 1987, desaparece la referencia a la hispanidad. “La fecha elegida, el 12 de octubre, simboliza la efeméride histórica en la que España, a punto de concluir un proceso de construcción del Estado a partir de nuestra pluralidad cultural y política, y la integración de los Reinos de España en una misma Monarquía, inicia un período de proyección lingüística y cultural más allá de los límites europeos” dice el texto de la ley que regula la celebración. En 1997 un real decreto establece que la Fiesta se celebre con un desfile de las Fuerzas Armadas con presencia de sus majestades y las principales autoridades políticas.

SENTIMIENTOS ENCONTRADOS Y CELEBRACIONES ALTERNATIVAS

La historia se ve distinta desde el otro lado de la orilla. Aunque los países hispanos se adhirieron a la fiesta y así añadieron El Día de la Raza y después El Día de la Hispanidad a sus calendarios, han ido apareciendo voces críticas con el significado histórico de la efeméride. La visión etnocéntrica de la fiesta, la del lado de los conquistadores, no puede ser la única. ¿Qué debieron sentir aquellos que vieron llegar a Colón el 12 de octubre de 1492? Eso se debió preguntar el escritor uruguayo Eduardo Galeano cuando escribió en su libro Los hijos de los días sobre la fecha del 12 de octubre: “En 1492, los nativos descubrieron que eran indios, descubrieron que vivían en América, descubrieron que estaban desnudos, descubrieron que existía el pecado, descubrieron que debían obediencia a un rey y a una reina de otro mundo y a un dios de otro cielo, y que ese dios había inventado la culpa y el vestido y había mandado que fuera quemado vivo a quien adorara el sol y a la luna y a la tierra y a la lluvia que la moja”… En este sentido se ha cambiado el nombre de la celebración por otros claramente reivindicativos: el Día de la Resistencia Indígena, en Nicaragua y Venezuela o el Día del Respeto a la Diversidad Cultural, en Argentina. Otros conservan los nada reivindicativos Día de la Hispanidad, Día de la Madre Patria, Día del Descubrimiento y Día de Colón.

El 12 de octubre es una fiesta que se ha celebrado con distintos nombres y con distintas motivaciones. Podemos celebrarlo por un motivo o por su contrario. Que cada uno celebre o lo deje de celebrar, se enorgullezca o se avergüence porque las fechas históricas no son del gusto de todos. Aunque de forma totalmente hedonista se agradece que el 12 de octubre aparezca rojo en el calendario, sea día de fiesta y no se trabaje.

Sobre una celebración distinta a las que se celebran merece la pena leer el artículo de Pedro Carasa de la Universidad de Valladolid. “A la hora de celebrar a la Nación Española, hoy no nos motiva la raza, no nos impulsa la hispanidad, no nos mueve la exaltación religiosa, no nos impele un espíritu castrense, sólo habría de estimularnos un proyecto común de convivencia plural y tolerante, de solidaridad e igualdad entre todos los españoles. Convendría inventar fórmulas nuevas “.