“Blackout” es la exposición del artista Tres, el estudioso del silencio
Tras cinco meses de la muerte del polifacético autor, La Virreina rinde homenaje al tema que el artista abordó con más profundidad: la ausencia de sonido
“Blackout” es la primera revisión antológica que recoge la trayectoria del artista de Premià de Dalt y se exhibe en las paredes de La Virreina. En el lenguaje cinematográfico, este término se utiliza para denominar los fundidos en negro. El blackout y el silencio son una traducción cinematográfica para separar dos escenas, mediante una transición; anunciar el principio o el fin de una historia.
La trayectoria de Tres va desde el arte sonoro hasta la performance, desde el ready-made hasta la fotografía o el collage, sus proyectos particpan de los experimentalismos que salpicaron el campo estético entre los años ochenta y la actualidad. No obstante, su obra parece desarrollarse en la retaguardia de las corrientes hegemónicas, igualmente de espaldas a las impugnaciones subalternas.
Los proyectos de Tres problematizan aquellos usos históricos y públicos que han modelado el valor de las palabras, pero sobre todo abren nuevos territorios de enunciación para el conocimiento, líneas gramaticales donde se nos convoca a reimaginar la subjetividad colectiva. En este sentido, Tres se inscribe dentro de una genealogía artística intempestiva y sofisticada a partes iguales, que engloba a James Lee Byars y a Susan Sontag, a John Cage y a Joseph Beuys o William S. Burroughs.
Por otro lado, sus «ancestros» literarios —Mallarmé, Artaud, Beckett o Salinger— hablan de un autor que prolonga esa línea subterránea que, partiendo del dadaísmo y siguiendo la senda conceptual, percutió vocabularios, nomenclaturas y conciencias plásticas. Férreamente unida a una radicalidad sin tiempo, la obra de Tres apenas esconde otra clase de compromiso: un pacto con la belleza que trae consigo batir de alas y rugir de sables, cierta reinvención de las potencialidades de la poesía que deviene primero silencio y más tarde disparo.