#Laculturanoesunlujo

No vamos a descubrir que el teatro es cultura y no entretenimiento pero actualmente triunfan dos obras de teatro en el Romea que buscan la reflexión en el espectador y agitan sus mentes y sentimientos. Por un lado tenemos “Oleanna”, donde David Selvas adapta el Mamet más punk y afronta con éxito las dificultades de comunicación del ser humano. Y por el otro, la revelación del año pasado, “Sé de  un lugar“, nominada a tres Premios Butaca con su lucha por explicar la barrera de la incomunicación del amor.

Reunimos a la protagonista de Oleanna, Carlota Olcina, y al director de “Sé de un lugar”, Iván Morales, para dar con ellos un repaso a la situación actual de la cultura.

Iván: Carlota, cuando empieza Oleanna, la voz en off de Boixaderas recibe al público con el mensaje: “La pujada de l’IVA ha sigut una vergonya…”.

Carlota: El público cada día aplaude al escuchar este mensaje. Es una iniciativa que me encanta, supongo que ha surgido de ADECTA.

Iván: No sólo la cultura está amenazada, que lo está siempre, sino ahora también los ingresos de la cultura. Son las grandes empresas como ADETCA las que pueden lanzar estos mensajes. Realmente es un absurdo la subida del IVA.

Carlota: La verdad es que este inicio de temporada teatral lo hemos empezado todos con el miedo en el cuerpo, empezar la temporada con una subida del IVA tan brutal… Llenar 400 butacas con esa subida de precio…

Iván: Esta subida de IVA ha sido un “torpedo” hacia las industrias culturales porque no repercute sólo en el artista, repercute en el acomodador, en el técnico, en toda la gente que trabaja en la industria cultural. Y lo más preocupante del IVA es la delimitación del público, qué tipo de gente puede venir al teatro. Yo soy feliz cuando veo que el público que viene es muy heterogéneo, gente rica, gente sin recursos,… Esa es la misión de la cultura, que nos una a todos, y con esta subida de impuestos se está privando de cultura a un amplio sector de la sociedad. Y luego está la eliminación de subvenciones…

Carlota: Sí, bueno, pero en momentos de crisis se buscan alternativas y vías paralelas donde se crearán productos originales.

Iván: El problema es que nos hemos acostumbrado a vivir en la cultura de la subvención, pero no sólo cultural, también en el mundo industrial y siempre han habido “listos” que se han aprovechado. Pero si la opción es el neoliberalismo total y la cultura es válida sólo en los resultados económicos que ofrece como producto, ésa tampoco es la solución. Porque en estos términos sólo hay espacio para “Torrente” y “Lo Imposible”, que me parecen cojonudas las dos, pero si sólo hay espacio para eso no tendremos una cultura sana. Un grupo de gente, una nación, necesita una cultura en la que reflejarse para poder trabajar su identidad, una nación sin cultura es muy peligrosa y es un grupo de gente que no se quiere a sí misma. Porque la cultura es un espejo y si tú no quieres mirarte al espejo es que no te quieres.

Carlota: En el momento actual ser actor se ha convertido en un acto político, pero no sólo los actores, cualquier trabajo se ha convertido en un acto político con estas represiones económicas. Pero no debemos olvidar que el teatro ha de ser muchas cosas, hasta un mero entretenimiento, y con IVA o sin IVA nuestra profesión ya requiere implicación

Iván: Sí, por ejemplo tu papel en “Oleanna” es muy político.

Carlota: Sí, muy reivindicativo. Tiene cosas que decir y con un gran carga de reivindicación. Lo que me encanta de “Oleanna” es pone las cartas sobre la mesa y, sobre todo en el momento que vivimos, toca la fibra. A uno le tocará el tema de la educación, a otro el de la incomunicación, a otro el abuso de poder.

Iván: Y a ti, ¿cuál te toca?

Carlota: A mí el abuso de poder y la incomunicación. Son los dos temas que me han atrapado de los cientos que Mamet propone con “Oleanna”, cientos de propuestas para pensar, reflexionar. Sin necesidad de posicionarse, yo prefiero no posicionarme, dudar y seguir pensando.

Iván: Sin posicionarte te veo implicada cómo nunca en esta obra. De otro lado, creo que es la única manera de sacar para adelante una obra de tan sólo dos actores.

Carlota: Sí, defender el texto a muerte, si no se quedaría en un discurso intelectual. Son discursos, son palabras que hay que trabajar desde el estómago para darle fuerza. Vosotros con “Sé de un lugar” también trabajáis desde la entraña.

Iván: Sí, nosotros tenemos el referente de Eric Rohmer y su idea es que las personas hablamos y hablamos pero tenemos otro motor. Rohmer también es muy moralista pero tiene una amabilidad hacia el ser humano que Mamet no tiene en absoluto. Quizás esta diferencia se refleja en la diferentes reacciones del público.

Carlota: Sí, de “Oleanna” los espectadores salen sublevados y con ganas de luchar por la situación que vivimos. Y de “Sé de un lugar” salen con un buen rollo positivo-pensativo.  Esas reacciones son las que queremos provocar y eso diferencia el entretenimiento de la cultura. El IVA actual nos ponga a la altura de entretenimiento y no de cultura, pero debemos seguir emocionando, haciendo sentir y pensar.  Aunque sin cerrar tampoco la puerta al mero entretenimiento.

Iván: Dar entretenimiento, sí, pero removiendo al espectador. Utilizar las herramientas del entretenimiento para hacer cultura. Algo que políticamente no interesa, por ejemplo… Italia, Berlusconi, un hombre que venía de editar revistas porno y de cantar en cruceros, la imagen pura del entretenimiento sucio, ¿qué ha conseguido con sus canales de televisión y su política? Crear varias generaciones de ciudadanos que no quieren plantearse cosas, que no luchan…

Carlota: Eso sí que me irrita, la televisión. ¡La televisión no es cultura! Cómo puede ser que una herramienta tan poderosa que se cuela en todas las casas y no se aprovecha para difundir la cultura. Reivindicamos los recortes culturales, pero también tendríamos que reivindicar qué pasa con la caja tonta.

Iván: Quizás nosotros seamos la primera generación que busca la calidad en la televisión, que buscamos lo que antes se buscaba en el cine. Por ejemplo “The wire” es para nosotros como “El padrino” para nuestros padres, pero eso son excepciones. En “Sé de un lugar” hablamos de “Hombres, mujeres y viceversa”, es un programa que me turba, porque lo que te dice es que la mejor salida profesional de la juventud es ir a un gimnasio, tomar esteroides, prostituirte un poco y si pasas por ahí podrás comprarte un coche, hacer bolos en discotecas y como éste muchos programas. Si coges la tele como una esponja, los jóvenes de hoy se pueden quedar con el mensaje de que no hace falta estudiar ni luchar; la vía de éxito es la prostitución televisiva. Si eso es lo que provoca la televisión en lugar de provocar el pensamiento y la curiosidad, vivimos en un país que se va la ruina.

Carlota: Los programas culturales están en extinción, tenemos el último caso del “Bestiari”. Puedes estar de acuerdo con el sketch, considerarlo vulgar o no…

Iván: Yo el 99% de la programación la considero vulgar y lo que realmente me sabe mal es que todo un equipo humano se queda sin trabajo por esto y, sin embargo, un Mosso d’Esquadra puede hacer mofa de sus agresiones o un político decir barbaridades pero ninguno dimitirá. En el “Bestiari” se han equivocado, yo creo. Puedes provocar, por ejemplo Mamet es un provocador, pero es un genio. Todos nos equivocamos alguna vez pero los hay que hacen de la equivocación un estilo de vida y no pringan nunca.