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Hoy triunfa más la idea de transformación, donde nada es nuevo verdaderamente aunque pueda llegar a parecerlo.
La victoria de Parásitos, de Bong Joon-ho, en la reciente gala de los Oscar vino a confirmar una realidad que muchos conocían desde hace tiempo, el cine coreano es mucho más que un divertimento para snobs y hipsters de Gracia. Estas son algunas de las películas que no te deberías perder.
El extraño
A algunos, sus más de dos horas y media de duración les pudo parecer excesivas, pero lo que es cierto es que se necesitaba ese metraje para contar este descenso a los infiernos. El extraño es una oda al cine clásico, una montaña rusa de angustia y suspense con paradas a géneros como la comedia negra, el terror o el western en una historia sobre una serie de asesinatos salvajes y misteriosos que azota una pequeña comunidad rural. Los rumores y las supersticiones echarán más sal a la herida.
Snowpiercer
Comentario social, sí, pero también con ese toque irónico que ya se podía ver en Snowpiercer, esa chaladura con la que Bong Joon-ho nos voló la cabeza hace seis años y que este año tendrá una adaptación televisiva en Netflix con Jennifer Connelly al timón del elenco. Snowpiercer demostró que se puede hacer un blockbuster con músculo y cerebro a la vez en esta aventura en tren postapocalíptica cargada de concepto, simbolismo y ambición visual.
Hierro 3
Cuando algunos treintañeros vemos el nombre de Kim Ki-duk no podemos evitar asociarlo a nuestros años universitarios, de descubrimiento cinematográfico y primeros contactos con el VOSE y el cine de otras latitudes. El coreano es una sombra de lo que fue en los dosmiles, pero para el recuerdo quedarán películas como esta Hierro 3, un desconcierto de cinta que pone en cuestionamiento nuestra noción de la propiedad, la privacidad, la comunicación y la posesión a través de dos personajes fantasmagóricos cuyos caminos se cruzan.
Burning
Cuando ya empezábamos a pensar que la obra de Haruki Murakami era imposible de trasladar a la gran pantalla llega Lee Chang-Dong y nos entrega este maravilloso thriller cocido a fuego lento durante dos horas y media. Burning adapta una historieta del escritor japonés sobre un joven mensajero que se reencuentra con una amiga de la infancia que le encarga cuidar de su gato durante su viaje a África. A su vuelta, le presenta un joven misterioso y adinerado, lo que dará pie a una dinámica de lo más perturbadora.
Oldboy
Durísimo escoger de entre la filmografía del maestro Park Chan-wook, pero quizá la apuesta más segura sería la de Oldboy. Segunda parte de la trilogía de la venganza que ideó el coreano en los dosmiles, la película arrasó en Sitges y se hizo con el gran premio del jurado en Cannes. Buena parte del cine de género posterior le debe mucho a esta historia sobre un hombre de negocios que es secuestrado y confinado durante años en una celda sin saber muy bien la razón. Diez años después hubo un remake de Spike Lee que, lamentablemente, no le hizo justicia.
Hoy triunfa más la idea de transformación, donde nada es nuevo verdaderamente aunque pueda llegar a parecerlo.
No existe un mundo perfecto único, varios modelos conviven y se yuxtaponen. En la mezcla de ideas está el valor.
Esta colección se dedica a esas ansias de vivir la vida al máximo para acabar en el hoyo. Una galería fotográfica de Bernat Rueda.